Creemos en nosotros,
aquí nadie reza.

martes, 12 de abril de 2011

Treparé por tu espalda para llegar a tu cuello.

Beth miraba a través de la ventana a los transeúntes ajenos a su existencia.
En sus manos, la taza de té humeaba, lasciva en su ignorancia.
Al otro lado de la ciudad, Andreu dormía y soñaba con una mujer aérea, que corría surcando el aire, de espaldas a él. Su pelo rojizo ondeaba alegremente ante sus ojos, y él corría y corría detrás de ella.
Quería verle la cara, sus ojos, sus labios frescos. Pero ella corría y nunca se giraba estaba predestinada a estar siempre dándole la espalda.
Andreu no se dio cuenta de la belleza del paraje por el que corría. Estaba nublado, los colores mezclados de blanco, las piedras inacabadas, todo salido de un cuadro, un esbozo de Beth, con una ninfa corriendo a lo lejos, hecha para no ser alcanzada nunca.

Ya estoy algo más tranquila. Supongo que se me juntarán demasiadas situaciones, demasiados exámenes (venga, sólo me quedan 3 horas de exámenes, yo puedo sobrevivir).
Quedan dos días y horas para irme 3 semanas, para desaparecer y que nadie sepa dónde he estado, si en mi casa, en mi monte o quién sabe, quizás en el polo sur conociendo algunos pingüinos (fijo que tienen mejor conversación que la mitad de la gente de aquí).
Mi desencanto por casi todo sigue estando ahí. No veo ningún sentido a nada, y me pregunto si realmente existe o merece la pena hacerlo.
Estoy cansada de callarme, de hacer como si no supiera nada. Le gritaría a la cara que tiene un problema enorme, que está obsesionada.
Me cabrea demasiado la gente, hasta tal punto que han conseguido que esté indiferente, me encuentro en un estado que odio. Soy un puto zombie porque me da igual, como si se muere delante mío. No lloraría, no me llevaría las manos a la cabeza, creo que ni siquiera llamaría a nadie para que recogiesen el cuerpo. Hay gente que no merece ni eso, aunque una vez muerto, qué más dará que estemos bajo tierra que no en cualquier esquina (no creo que el día del juicio final vayamos a sobrevivir, y si es así, lo tiene más fácil, tendrá aire para respirar y no tendrá que levantar kilos de tierra después de años, aunque claro, esto es muy medieval, aunque es normal, es mi época favorita de la historia).
Y eso... Que a ver cuándo cojones reviviré (tell me when I'm gonna feel alive).

Un abrazo nublado.

lunes, 11 de abril de 2011

Aurea mediocritas.

Hoy nos han dado la orla, y bueno, como en todas las fotos, salgo blanca, pero bueno, ni tan mal. Pensé que saldría peor.
Pero no quiero hablar de eso... He escuchado un comentario de un imbécil que ni siquiera se moleste la ostia que he pensado en darle (gente así estaría mejor muerta o castrada), que decía a una amiga mía (casi literal):
- Joder, qué asco, estoy al lado tuyo en la orla
Me he girado y de verdad que se me han pasado miles de torturas posibles por la cabeza.
Si se acaba el mundo en 2012, juro por quien sea que a ese le mataré con mis propias manos y le haré comerse cada trozo de piel que le arranque, ya verá cómo le da asco él mismo.
De qué mala ostia me ha puesto... Sin más. Si vuelvo a oír su voz refiriéndose a mi querida C.l no pienso contenerme, según salga del edificio le voy a pegar tal ostia que no va a querer follar el resto de su vida de lo que le va a doler.
Y todo por racismo... El chaval es un gilipollas que se cree superior por haber estado en américa un año y tener un acento americano que exagera (por favor, que alguien pruebe a decir "slang" lo más exageradamente posible, veréis lo ridículo que suena), suspende química y se atreve a decirle a otra de mis amigas que no tiene ni idea (claro por eso ella tiene un 9).
Joder, me revienta muchísimo [este en un barrio de gitanos no sobrevive (creo que me haré amiga de alguno de ellos, a ver si le pegan o algo)].
Lo más curioso es que no creo que aprenda. Seguirá sintiéndose superior a todo el mundo y diciendo, aún estando en el hospital, que él sabía defenderse, lo que pasa es que le dieron pena, y no quería hacerles daño.

Bueno, ya, se acabó.
Cambio de tema.
Me han invitado a un evento en el tuenti de una manifestación por la III República.
Yo jamás he entendido por qué la gente se queja del rey si no hace casi nada y ha ayudado a la democratización española, y adoran al PSOE, que es el que básicamente nos ha llevado a esta situación con su pésima gestión.
Vale, la podríamos haber prevenido todos no pidiendo tantos créditos, pero el problema ahora no es ese, sino que la confianza está por los suelos.
Aún así, si el Gobierno no hubiese invertido millones (que son las cantidades que suelen manejar) en la compra de lo que sea (quizás en putas, armas y drogas, que es lo que verdaderamente mueve este país, por muy ilegal que sea) a crédito, no estaríamos así.
Pero bueno, ya se sabe que el que descubra por qué se ha producido esta crisis ganará el nobel, y no creo que sea yo.
Éste es el comentario que he puesto en el evento (me da pereza reescribirlo, la vagancia me puede)

Arturo, estoy de acuerdo contigo, y he leído por ahí comentarios de que si en otros países les va mejor y son repúblicas, pero primero habría que depurar lo que se dice bastante todos los partidos políticos, que en caso de no haber una monarquía, dirigirían nuestras vidas más de lo que ya lo hacen.
No es tanto la república, como el socialismo, ni como lo que sea, sino que haya alguien en el poder con cabeza, y que la gente no vote lo que diga el vecino de al lado, que ese quizás sea ferviente seguidor de ZP, y un par de votos que mandarán a España a la mierda, más aún. Aunque con el PP las cosas no irán mejor, y no hay más partidos que merezca demasiado la pena plantearse, los demás, sin una coalición, no son nada.
Y a parte de una depuración política, habría que hacer cambiar la mentalidad a la sociedad, que si están acostumbrados a la monarquía, seguirán queriéndola, por que somos así de gilipollas, no aceptamos el cambio por miedo (ya sabéis, mejor malo conocido que no bueno por conocer). Y esto supone invertir en el sector educativo, para que desde críos nos eduquen diciéndonos que la república es lo menos malo y encima, en su justa medida, porque en la adolescencia tendemos a rebelarnos contra todo lo que se ha intentado inculcarnos mientras éramos pequeños.
Y todo esto requiere pasta, mucha pasta o alguien que lo quiera hacer por caridad, y esos se cuentan con los dedos de las manos, y dentro de esos, habrá discrepancias, en matices, seguramente.
Por lo tanto, hay que conseguir cambiar la sociedad, y con eso, ganarse apoyos de la clase alta, en su defecto, media-alta.
Y quién cojones tiene tanta paciencia?
Si a alguien se le impone algo por la fuerza, se suelen rebelar, eso hay que tenerlo en cuenta.


Y eso... Voy a cabrearme con Dios por haber dejado existir cosas tan estúpidas (no llega ni a persona ese gilipollas).

Un beso. :)

sábado, 9 de abril de 2011

Llueve.

Llovía a tinteros. Y las palabras se desparramaban en tachones indescriptibles.
Las palabras de todos caían como plomo sobre el asfalto, y lo hundían más, y ellas, insensibles, pretendían llegar al centro, pero se evaporaban antes de llegar.
Mientras, lloraban, e iban dejando pequeños regueros que algunos se dedicaban a recolectar, para así formar un recuerdo de agua. Una página escrita por ella.
Otros, se dedicaban a cortarlas para formar otras nuevas, y otros muchos, simplemente observaban cómo caían, cómo hacían carreras por el cristal rayado de la cordura.
Y otros, simplemente bailaban, disfrutaban, se fundían y resbalaban entre los dedos que marcaban el ritmo (los pasos que chapoteaban), y eran felices al saber que estaban con alguien que les contestaría con los mismos silencios que ellos hablaban.



(Smile, smile at me, and I'll feel free)

It's okay.



Honey... I have to say, please, forgive me, I'm doing all wrong.

Love you.

jueves, 7 de abril de 2011

7 de abr...

Recordar a A. que hoy es su cumpleaños, que ya le felicité para él ayer, para mí hoy. Ahora, te quejarás, la primera vez que estoy en España (por suerte no por mucho tiempo) el día de tu cumple y encima que me quedo despierta hasta las 12 por ti, te menciono aquí.
Y eso, que seas muy feliz, que cumplas muchos más, que no tengas ningún hijo, y cuando te cases, invítame a tu boda. ^^
A ver si algún día hablamos y te comento lo que he estado pensando sobre las ideas y las creencias, de Ortega.
Lo peor de todo es que eres el único que me entiende cuando hablo de cosas así, aunque en realidad te entiendes tú a ti mismo.
Qué ida de olla más grande...

Bueno, lo dicho, que te lo pases bien. :)

martes, 5 de abril de 2011

Genios.

Llevo varios días que estoy sin estar, pasando por la vida sin dejar huella y sin querer dejarla.
Últimamente, en mi anodina existencia, he ido escuchando cada vez más mi canción favorita, de entre todas mis canciones, Invierno, de las 4 estaciones de Vivaldi y al descubrir que uno de mis artistas favoritos la toca con su gran maestría, mezclándola y haciendo que mute en algo más moderno (lo que tiene el crossover).
Adoro el violín, es de los instrumentos que más me gusta, y no me dejan aprender a tocarlo, dicen que soy demasiado mayor para aprender, pero antes de morir, pienso aprender.
Casi he terminado la novela que me estaba leyendo, y se centra básicamente en el piano, y no deja de nombrar Tristesse, de Chopin, reconozco que jamás la había escuchado, pero no me gusta nada, esa sonata me parece hecha para un violín, pero depende de quién la toque, como todo. La versión de Richard Clayderman es bonita, en piano, por supuesto, pero tiene canciones, a mi gusto, mejores, como Romeo y Julieta.
Últimamente estoy dejando los estilos más fuertes que escuchaba hace tiempo, aunque Epica sigue estando con Sensorium, casi siempre, en mi cabeza.
La verdad es que podría hablar de música horas y horas, pero tendría que estudiar.
Cambiaré mi forma de hacerlo, en vez de concentrarme en aprender, voy a verlo como un recordar continuo de palabras, y me voy a dejar llevar por ellas, en vez de llevarlas, arrastradas, yo a ellas.
Pongo algo de otra de mis pasiones, la fotografia.



















Un beso. Que no os deshagáis por el camino.

lunes, 4 de abril de 2011

Entre nos.

Siento estar tan ausente, pero ha llegado un punto en el que no tengo nada que escribir ni ganas de hacerlo. He dejado de opinar de casi todo y me limito a pasar las horas riendo, esgrimiendo una sonrisa desgastada.

Una de las pocas cosas de las que opino, y me molesta bastante es ese afán de liarse con gente que no se conoce, y me jode mucho, porque siempre tengo que improvisar escusas que no se sostienen, y sé que sentirse rechazado es horrible, y que por eso, muchas veces, se pierde a gente que ni siquiera has tenido pero que sin ellos no podrías estar aprendiendo a jugar al muse (no sé cómo se escribe).
Tomé la decisión hace tiempo de no salir por las noches, y no lo estoy cumpliendo, cada vez es más veces, y más días, hasta más tarde, estirando las horas inaguantables donde sólo queda una persona para hacerme reír y pasarlo decentemente (muchas gracias D.o).
Ahora que he vuelto al no sé, he vuelto a caer en lo mismo. Mis propias propuestas de olvido se van rompiendo, y no me siento con fuerzas para luchar. Supongo que sentirse arropada por un tiempo y después caer, otra vez, es mucho mejor que estar siempre sobre una línea recta. Sin sobresaltos, sin sorpresas, no le queda nada a la vida.

Si se les impide soñar, las personas enloquecen, dijo no sé qué escritora (¿Rosa Montero?).
Yo cambiaría soñar por sentir los sueños, no siquiera por luchar por hacerlos reales, sino por tener la imaginación suficiente como para ser capaz de sentirlos en nuestras cabezas.
Cierto estudio decía que se activan las mismas áreas del cerebro cuando estamos viendo algo que cuando cerramos los ojos y nos imaginamos lo mismo (quizás lo haya soñado, no es la primera vez que me pasa). Supongo que (de ser cierto esto,) todo está relacionado con el cerebro, de nuestras capacidades y de qué zonas potenciamos.

Es triste saber que no sabemos absolutamente nada con seguridad, que confundimos el sueño con la vigilia (¿de qué filósofo es esto?). A veces sería bonito saber que todo es un sueño y que cuando despertemos no nos acordaremos de esto, y claro, yo me pregunto, y si fuese realidad que todo es un sueño, ¿qué pasaría cuando nos despertásemos? ¿Qué pasa cuando nosotros, parte de un sueño, nos dormimos? ¿Al despertar, habrá otra vida al otro lado de los sueños? ¿Seremos lo mismo que somos ahora, como cuando soñamos con nosotros mismos?
Y millones de preguntas que me van fusilando y haciendo que mi razón escupa ideas a quemarropa.


Contaré un poco de mi vida últimamente... Ahora mismo me siento mal conmigo misma. Me siento la cosa (ni siquiera llego a persona, después explico esto) más ruin y estúpida de todo el mundo.
Sé que voy haciendo daño sin darme cuenta a mucha gente, y de que haré daño a muchos más, y por mucho que pueda parecer que soy cruel, que no me importa lo que dicen, me suele importar bastante (¿cuál es el infinitivo de yo suelo lo-que-sea?). No en el sentido que les importa a los demás, sino me importan las críticas que me ayudan a mejorar, y muy en el fondo, todas ayudan, por mucho que queramos ponernos a gritar que somos perfectos.
En unos días desapareceré del mapa 3 semanas, y justo ahora es cuando siento que no debería irme, que me (nos) ha costado demasiado llegar hasta donde estamos ahora, de facto, creo que le ha costado más a él, ha tenido que romper sus fachadas para quedarse con un par de ellas, pero sigue siendo precioso, a su manera. Siempre quedará algo por descubrir escondido, y creo que eso es lo que más me gusta de él, aparte de sus ojos.
Pero bueno, ya no hay marcha atrás, y nunca me ha gustado que la haya, o mejor dicho, saber de su existencia y huir en vez de encarar lo que sea como sea.

Bueno, me voy a colegio, a ver qué fabulosa nota tengo en filo (creo que se acerca al 0, biba).

Un beso enorme.